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| Imagen de archivo |
SANTO DOMINGO.- El Primer Tribunal
Colegiado de esta provincia sentenció a 30 años de prisión a un hombre que le
segó la vida a un vigilante privado para despojarlo de su escopeta y luego
hirió a dos hijos de su expareja a quien también intentó matar, en un hecho
ocurrido en Sabana Perdida, Santo Domingo Norte.
Jarur Serrano Báez fue encontrado
culpable de violar los artículos 295, 296, 297, 298, 302, 379, 382 y 383
tipificado como asesinato, tentativa de homicidio, golpes y heridas voluntarias
en el Código Penal Dominicano y los artículos 39 y 40 de la ley 36 de la Ley de
sobre comercio, porte y tenencia de armas de fuego, en perjuicio de Manuel
Emilio de Jesús, de 57 años de edad.
Según el expediente instrumentado por el
Ministerio Público, el hecho ocurrió el 04 de agosto del 2012, cuando Serrano
Báez acudió al puesto de trabajo del vigilante Manuel Emilio (hoy occiso) a
quien le propino un golpe con un palo y al quitarle el arma le disparó con la
misma, luego se dirigió a la casa de su expareja, María Francisca Castillo,
donde hirió a dos de sus hijos.
El homicida fue herido y arrestado por
una patrulla de la Policía minutos después de que baleara a Yonatan de la Cruz
Castillo, de 23 años, y a su hermana Yuli, de 15.
El Ministerio Público logró demostrar
durante el juicio de fondo que el hoy sentenciado cometió los delitos que se le
imputaron, por lo que deberá cumplir la condena en el penal de la Victoria.
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