Campaña a destiempo

Por manuel Hernández Villeta/A Pleno Sol

Manuel Hernández Villeta (Opinión)

Realizar una  campaña política a destiempo, es criminal, Lleva a que el país tenga que invertir cuantiosos recursos en propaganda y lucha partidaria. La idea es que todas las aspiraciones y candidaturas se presenten y se aprueben faltando un año para las futuras elecciones.

La economía dominicana ni los sectores pensantes, soportan que ahora mismo se lleve a cabo una amplia campaña política. El pueblo se merece un descanso.

Además, los políticos con campaña a destiempo, en todos los partidos, demuestran que únicamente les interesan sus beneficios personales.

La Junta Central Electoral constituye un organismo sin fuerzas, maniatado por sus propios demonios, buscando credibilidad pública, y rechazada por los partidos cuando no les favorece. Ahora tiene que actuar.

La JCE debe reglamentar el proselitismo de los partidos, y la salida a destiempo de precandidatos, desde presidenciales hasta de regidores. Lo que se demuestra es que en materia electoral, nadie tiene autoridad.

El pueblo está cansado de proselitismo. Con la nueva metodologia electoral, se pensaba que habría un respiro de tres años, pero ya tenemos los toques de clarín de que se arrancó en la campaña.-

En las votaciones municipales y congresuales se alargó el período en dos años, para de esa forma aglutinar las elecciones en un mismo año, y con trecho suficiente entre una y otra.

Por consiguiente no hay justificación  ni razones para que desde ya, se esté llevando a cabo un proceso de primarias para escoger candidatos con mucha anticipación,

La mística de los dominicanos tiene que ser el trabajo. honrado  y sudado, donde las posiciones se alcanzan por el sacrificio y el esfuerzo, no porque nadie haga un señalamiento de dedo.

Los máximos organismos de los partidos políticos tienen que trabajar, para impedir la barbaridad de que  surjan precandidatos a la carrera, sin tomar en cuenta las necesidades nacionales.

La vida institucional dominicana es frágil, no puede ser controlada, y por eso estos estimados provinciales que dan una idea clara de quienes intervienen a favor y en contra del voto de los partidos emergentes. Dejemos a un aldo una campaña prematura, y a trabajar