José Francisco Peña Gómez |
SANTO
DOMINGO.- El expresidente Hipólito Mejía exaltó, del doctor José Francisco Peña
Gómez, su genuino espíritu nacionalista, su amor a la República Dominicana, su
vocación de servicio y su sincero compromiso social, especialmente con los más
necesitados.
Mejía dijo que
“al recordar reverentemente el natalicio del Doctor José Francisco, reitero mi
admiración a su trayectoria de vida, mi apego a sus ideales democráticos, y mi
incansable lucha por hacer realidad sus sueños”.
A seguidas se
copia el texto del mensaje del expresidente Mejía: “Hoy, hace exactamente 82
años, nació en un hogar humilde el inmortal y siempre querido Doctor José
Francisco Peña Gómez.
“Al rendirle
tributo a ese ser humano excepcional, reitero mi gratitud a sus sabias
enseñanzas, mi valoración de su gran legado, y mi firme compromiso de continuar
trabajando para hacer de la República Dominicana una nación justa, próspera,
equitativa y soberana, como lo soñara el Doctor Peña Gómez.
“Al lado del
Doctor José Francisco Peñas Gómez, tuve el privilegio de recorrer todo el
territorio nacional y numerosos países de diferentes continentes. En cada uno
de esos viajes fui testigo del enorme talento, carisma y conocimiento de ese
gran hombre de bien.
“Digo con
satisfacción que, a lo largo de muchos años, fui testigo de su genuino espíritu
nacionalista, de su amor a la República Dominicana, de su vocación de servicio,
y de su sincero compromiso social, especialmente con los más necesitados.
“Fue
justamente por mi admiración y respeto al Doctor Peña Gómez que no dudé en
acompañarlo como su candidato a la vicepresidencia de la República, en el año
1990.
“Por esas
mismas razones, tampoco dudé en ceder esa candidatura cuando él me lo pidió por
razones muy particulares. Esa vivencia, antes que alejarnos, nos acercó mucho
más.
“Nuestra
amistad estuvo siempre por encima de los vaivenes de la política.
“Hoy, al
recordar reverentemente el natalicio del Doctor José Francisco, reitero mi
admiración a su trayectoria de vida, mi apego a sus ideales democráticos, y mi
incansable lucha por hacer realidad sus sueños.
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