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| Fidias Aristy |
SANTO DOMINGO.- “Muchos niños
desertan de las escuelas por problemas alimenticios o durante la etapa del
desarrollo de su personalidad, donde deben tener una respuesta del Estado y de
la familia, algunas veces esa familia no tiene como responder a esos desafíos,
y el joven encuentra en el distribuidor de drogas quien puede proveerle
solución a sus necesidades”. Expresó el Dr. Fidias Aristy.
El presidente del Consejo Nacional de
Drogas se pronunció así en declaraciones ofrecidas al Diario 16, donde enfatizó
que la familia a nivel global ha entrado en un proceso de agrietamiento y
disolución, ligado a la falta de las figuras parentales en el hogar. Siendo
esta el primer centro de socialización que tiene el individuo.
“Ha habido una ausencia de políticas
públicas capaces de suplir las necesidades que tiene todo individuo, sobre todo
el joven, por eso es necesario crear alternativas, como la está creando el
gobierno con la aplicación de la Tanda Extendida, lo cual constituye el
principal agente de prevención para la sociedad dominicana”. Declaró.
Señaló que la justicia surge para
mantener un equilibrio social, y sí la misma falta, estamos produciendo daños
de procedencia incalculable a la sociedad.
Argumentó que mientras existan
grandes mercados y la posibilidad de flujo de drogas por aguas del Mar Caribe,
la República Dominicana estará al asecho de esos grandes productores.
Sobre fuga pilotos
Al ser cuestionado sobre la fuga de
los pilotos franceses, el jurista expresó que en dos declaraciones sobre el
tema hay un elemento enfático, y ha sido el excluir la posibilidad de
complicidad.
“El hecho de que ellos llamen la
atención de que no se ha producido complicidad, es una forma de tratar de
despistar a las autoridades dominicanas de como en realidad se produjeron los
hechos, dejarlos en libertad fue un acto de típica imprudencia”, sostuvo.
Consideró que el gran desafío que
esto plantea, frente a la negatividad que de conformidad con su
ordenamiento jurídico Francia no va a devolver a territorio dominicano esos dos
pilotos, es investigar hasta las últimas consecuencias.
Dijo que la gran lección que deja
esto es que la criminalidad organizada requiere de un tratamiento especial en
su persecución y su juzgamiento.
Se debe enfatizar en la necesidad de
tener tribunales especiales para asuntos de drogas y narcotráfico, no de
usuarios, sino de casos como éste, que tengamos tribunales especiales, con
jueces altamente especializados en las consecuencias sociales que sus actos
tienen.
Aseguró que los jueces tienen que
medir como toda persona las consecuencias de sus actuaciones. ”Un juez tiene
que saber que sus acciones pueden tener consecuencias terriblemente negativas y
la falta de prudencia puede tener consecuencias muy nocivas en la sociedad
dominicana como lo es este caso”, consideró el Dr. Aristy.
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