Federico Antún Batlle (Quique), presidente PRSC |
SANDTO DOMINGO.- El presidente del
Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), ingeniero Federico Antún Batlle
(Quique), demandó una investigación profunda y seria que arroje la verdad sobre
la muerte de los 11 niños en el hospital infantil Robert Reid Cabral, al tiempo
que pidió al Gobierno que se reoriente la política pública en salud.
Explicó que independientemente de que
los infantes hayan sido ingresados al centro de salud con patologías diferentes
y en condiciones complicadas como explican las autoridades del hospital, “no puede permitirse que un hecho tan doloroso y sensible quede en el aire
sin una exhaustiva investigación que explique la razón de estas muertes”.
Quique Antún expresó preocupación por lo
ocurrido este fin de semana en el referido hospital infantil, lo que calificó
como una “tragedia nacional” que ha llevado luto y dolor a muchas familias
pobres.
El líder de los reformistas lamentó que
“cosas tan extrañas” sucedan en hospitales del Estado sin causar una gran
alarma en la sociedad dominicana, “lo que indica que estamos perdiendo la
sensibilidad social y humana”.
"En un país institucionalizado y
donde los valores no se estén deteriorando como lamentablemente está ocurriendo
en nuestro país, alguien con responsabilidad en esa materia ya debió haber dado
una explicación convincente de lo ocurrido", expresó Antún Batlle.
Dijo asimismo que urge una mayor
inversión en el área de salud en la República Dominicana, donde el Gobierno
pueda construir más hospitales y dotarlos de equipos de última generación para
que millones de dominicanos no sigan padeciendo las vicisitudes que viven
diariamente en los centros de salud del país.
El dirigente político dijo que es
tétrico el panorama que viven los dominicanos que no cuentan con recursos para
costear las elevadas atenciones que brindan los centros privados.
"Visitar un hospital público en
este país salvo honrosos casos, es penoso y vergonzoso", agregó.
El Presidente del PRSC dijo que en las
provincias la situación es peor, donde todos los hospitales que reciben
pacientes en estado delicado, “tienen que referirlos a los centros de
la capital porque no cuentan con los equipos y muchas veces personal médico
preparados para dar respuestas a esos casos”.
Sostuvo que casi siempre esos casos
terminan en tragedia para el enfermo y sus familiares “ya que si el paciente no
muere, termina siendo una carga insostenible para sus parientes”.
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