Politica, economía

viernes, diciembre 13, 2013

Una contundente derrota

Dedicado a mi hermano Jacobo Torres de León combatiente de primera fila de la Revolución Bolivariana de Venezuela.

Silvio Arzeno (Opinión)
En las recientes elecciones municipales del 8 de diciembre, la derecha venezolana hizo un cálculo erróneo sobre la realidad actual de su país y de los alcances de su plan desestabilizador económico, político y social, apostando a convertir las elecciones y sus resultados en un plebiscito contra el Presidente Nicolás Maduro y la revolución bolivariana, obteniendo una nueva y contundente derrota. La derecha de Venezuela y sus titiriteros yanquis fueron por lana a estas elecciones y salieron traquilados.

Calcularon los reaccionarios de la patria del libertador Simón Bolívar que con la tenaz aplicación, en vísperas de las  elecciones, de su plan desestabilizador económico generador de escasez de productos y altos precios las elecciones se realizarían en un marco de descontento de la población que se volcaría contra el gobierno y la revolución en las urnas.

No tomó en cuenta la derecha venezolana la fortaleza de la revolución, sus profundas raíces en el pueblo, la elevación de los niveles de conciencia política de los ciudadanos, su amor a la patria y a su proceso revolucionario y su lealtad a la memoria del Comandante Hugo Chávez Frías, No entendieron los conservadores que la Venezuela de hoy es otra Venezuela marcada por el paso de la revolución bolivariana,, con una población que mayoritariamente está dispuesta de llevar su revolución hasta el final, sin arrodillarse ante el imperio, rebosante de dignidad  y orgullo patrio, dispuesta a que Venezuela juegue su rol integracionista y solidario en la patria grande latinoamericana y caribeña.

Los resultados de las elecciones hablan claro y no dejan lugar a dudas, el Partido Socialista Unificado de Venezuela (PSUV) y las fuerzas aliadas en el Gran Polo Patriótico  han ganado hasta el momento 256 alcaldías de  337 que estaban en disputa y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha obtenido 74 alcaldías; también han logrado ganar las fuerzas revolucionarias la mayoría de las alcaldías en 23 de los 24 Estados Federales, incluso vencer a Capriles en el Estado donde gobierna Miranda.

En cuanto al voto nacional la pela dada  por los revolucionarios venezolanos a las fuerzas conservadoras fue de calzón quitao. Con el 97.32 por ciento de los votos escrutados la alianza PSUV y Gran Polo Patriótico habían  obtenido 5,111, 338 votos para un 49.24 por ciento, contra 4,435,097 votos logrados por la derechista MUD equivalentes al 42.72 por ciento, lo que significa una ventaja de 6,5 por ciento para los revolucionarios, nuevos resultados indican que el PSUV-GPP le llevan una ventaja de 1,110,000 votos a la MUD  para una diferencia porcentual de más del 10 por ciento, En estas elecciones las fuerzas revolucionarias acrecentaron  en más de seis veces la votación lograda en las presidenciales de febrero de este mismo año.

Estos resultados evidencian una contundente derrota para las fuerzas reaccionarias venezolanas, el fracaso de su plan desestabilizador económico y el fortalecimiento de las fuerzas chavistas, la decisión innegociable de la mayoría de venezolanos de continuar impulsando su revolución, de producir los cambios económicos , políticos y sociales que su sociedad reclama y de contribuir a la integración y cooperación de los países de la patria grande latinoamericana y caribeña, tal como lo soñaron Bolívar y Chávez.

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