Castro Castillo, jefe de la PN |
El jefe policial sostuvo, además, que adoptaba la medida con el interés de “desarraigar esa mala práctica o método negativo de acción policial que se ejecuta desde hace décadas en todas las dotaciones policiales del territorio nacional”.
Agregó que por distintas vías ha recibido denuncias de que miembros de la institución realizan “arrestos molestosos” de ciudadanos que transitan en diferentes vías.
En tal sentido, Castro Castillo, sostuvo que en lo adelante sólo se realizaran detenciones y conducciones de ciudadanos por violaciones flagrantes o en los casos de reconocidos delincuentes.
En caso de que una persona presente un perfil sospechoso, los miembros policiales deben observar estrictamente los conocimientos sobre la materia, realizar una rápida depuración de campo del ciudadano en el mismo lugar de la detención.
En una declaración que leyó, en el Palacio de la Policía, dijo que en caso de ser necesaria una depuración más amplia, los ciudadanos no pueden exceder una hora detenidos, tiempo que estimó suficiente para determinar si existen antecedentes criminales o algún caso pendiente.
Dejó claro que la presente disposición debe ser acatada por todos los miembros de la institución, sin desmedro de la rigurosidad y firmeza en que se deben aplicar las acciones policiales en contra de los desaprensivos y perturbadores de la paz y la tranquilidad de la ciudadanía.
Castro Castillo informó, además, que el Inspector General de la Policía, general Frener Bello Arias, y el director de Asuntos Internos, coronel Orlando Martín Pichardo Reynoso, serán los responsables de fiscalizar y supervisar el estricto cumplimiento de la presente disposición.
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